martes, 21 de mayo de 2013

INDIOS


PARTE I

Los feriados acá siempre empiezan así. Las voces de Pérez y González  llegan desde su habitación irremediablemente, primero como un murmullo, luego ya un poco más fuerte, tal vez con alguna carcajada, uno de los dos pega un grito y empiezan a pelearse como si no fuera las seis y media de la mañana. Mi mujer les chista desde nuestra cama y hacen silencio. Tal vez González se excusa acusando a Pérez de haber empezado. El silencio dura apenas unos segundos y empiezan otra vez con el cuchicheo.  Así dos o tres veces más hasta que quien grita es mi mujer. Será de Dios, maldice y se levanta. Yo me estiro todo lo posible en diagonal sobre la cama y me vuelvo a dormir en un abrir y cerrar de ojos, sobre todo en un cerrar.